CORTAS HISTORIAS

Si en una carrera alguien tiene que ganar y otro tiene que perder quiero ser yo el que pierda, con tal de poder conseguirte. Ver tu textura tan amarilla como el sol y el aroma de tu cuerpo tan dulce como la miel, hace que todos mis motores funcionen a más de 270Km/h. Te he visto, te soñé y le pedí al universo alguien que me ayudara a solucionar todos los problemas de mi vida, y heme aquí te encontré. Casualidad o destino, no lo sé, pero en este instante solo quiero admirar la belleza de tu poder, porque no hay trofeo alguno como tú así fría como la nieve pero suave como la brisa, tan brillante pero tan escasa como un diamante florentino. En esta carrera todo es tan largo y difícil porque la pista tiene muchas curvas, piedras y obstáculos que podrían hacer que todo fracasara en un sencillo segundo o simplemente puede que me choque y de la nada vuelva a correr, yo estoy dispuesto a luchar y vivir con eso ¡sé que puedo conseguirlo! Te necesito, te necesito conmigo majest...

Sentí que me encontraba en aquel lugar tan magnífico y espléndido viendo el más hermoso alba, con su agua que corrían señalando la frescura de aquel sitio mostrándome la grandeza de su poder, su color que me transporta a la galaxia más extraña llena de órbitas inundando mi mente de sabiduría, poder y carisma. ¡Bienvenida a este mundo donde tú puedes ser lo que más desees ser! Eso era, era lo que deseaba dentro de mi corazón, mirar el reflejo de lo que amo plasmado en una simple fotografía que me hacía pensar en lo profundo y ligero que puede llegar a ser la vida. Helada, con la piel fría de ver en aquel lugar esa imagen, pues era la única que la veía, no quería quitar mi mirada de allí. Todos ignoraban aquel cuadro magnífico… Mi mente empezó a viajar en el espacio e indagar sobre lo que veía. ¿Quién hizo este dibujo? ¿Dónde está el pintor? ¿Por qué lo dejo en este lugar? ¿Me lo quiero llevar? ¡UNA MANCHA! De...